Y fue aquella mañana de 1968 cuando pensamos: "Juntos lo haremos mejor". Nos ilusionaba nuestro proyecto y empezamos con mucho esfuerzo, sí, pero nos dimos cuenta que trabajando funcionaba. Poco a poco hicimos un gran equipo. "A la gente le gustaba como trabajábamos" y nosotros creíamos en la empresa. Habíamos pasado a ser una cosa más que la unión y amistad de Manuel Castells y Joaquín Abad.

La trayectoria consolidó el proyecto. Fueron años de trabajo, y una triste noticia, con la pérdida de Manuel, nos unió todavía más. La familia Abad continuó desarrollando el proyecto y empezó el 20 de julio de 2007 una nueva etapa en un nuevo emplazamiento, con nuevas ideas, nuevos retos...